Próspero Ruggeri de Casal y los misterios de la primera
palabra de la Biblia: בראשית
Drach, La Armonía entre la Iglesia y la Sinagoga, vol. 2, pp. 34-35.
11. Próspero Ruggeri
de Casal, en el Piamonte, antes de su bautismo Rabí Salomón Meir[1], hijo de Moisés Novare,
personaje distinguido en su nación. Se había hecho una gran reputación como
cabalista, no sólo en Venecia, donde los judíos no podían admirar
suficientemente sus sermones, y en Jerusalén, donde fue nombrado rabino, sino
en todas partes del mundo. Antes de abandonar su tierra natal, la toma de Casal
por los españoles, que saquearon la ciudad, fue fuente de una gran fortuna para
él. No pudiendo resistir más a tantas pruebas de la verdad del cristianismo,
que encontraba continuamente en la Cábala, se bautizó el 25 de junio de 1664.
Al mismo tiempo, convirtió a varias familias judías. Su esposa, al principio
obstinada en el judaísmo, se bautizó el 6 de agosto. El relato de esta notable
conversión se encuentra en la biblioteca de la Propaganda de Roma, entre los
manuscritos dejados por el erudito P. G. Pastritius, profesor de teología
polémica en el colegio del mismo establecimiento. Bartolocci ha insertado una
parte en el vol. IV de su Bibl. Rab. pp. 526 sigs.
12. La conversión de Próspero, como es bien sabido, despertó una gran animosidad contra él entre los judíos, sobre todo porque era muy celoso de la conversión de sus hermanos de sangre. Había entonces en Italia un joyero judío, David Tintore, que era opulento, muy estimado y bien recibido en las cortes de todos los príncipes. Era un gran señor, un Rothschild de la época. Se le llamaba el Duque de los Judíos. Odiaba aún más al neófito porque habían sido amigos. Decía: Mi felicidad sería asar el corazón de Próspero y dárselo a comer a los perros. Éste, informado de ello, se dirigió a él con valentía y le mostró, en el primer versículo del Génesis, explicado según los principios de la Cábala[2], la trinidad de Dios y la encarnación del Verbo divino. Continuó probando los demás artículos de la fe católica de la misma manera. David Tintore se lanzó al cuello de su antiguo amigo, declarando que, a partir de ahora, eran hermanos en Jesucristo.
***
Bartolocci, Bibliotheca Magna Rabbinica, vol. IV, pp. 526-537.
1951. R. Salomón Meir Ben Mosis Navarra.
De la ciudad de Casal
de Monte Ferrata, nació en el año 5366 de la creación del mundo, el 1606
después de Cristo, el día 24 del mes Tevet. Fue signado con el nombre Salomón
a fin de perpetuar su memoria, y puesto que en el día de su nacimiento se leía
en la Sinagoga la historia del nacimiento del Profeta Moisés, en el cual
refieren los Rabinos que toda la casa se llenó de luz, de aquí que se le agregó
el nombre םאיר, Meir, que
significa del que ilumina. De tal manera avanzó el adolescente en la
superstición judaica que apenas había cumplido los trece años cuando había
compuesto algunos sermones según la costumbre hebrea. Cuando tenía 18 años se
casó con Judith, hija del sacerdote Sansón, de la cual tuvo diez hijos, pero
cuando murió, sólo dejó una hija, de nombre Eva, que se casó en Jerusalén.
Habiendo muerto su primera esposa, recibió como esposa a Donina, llamada
así por el vulgo; pero cuando la ciudad de Casale fue sitiada por los españoles
y se obligó a los judíos a tomar las armas, y tras dejar un botín de no poca
cantidad de bienes y dinero en manos de los sitiadores, obtuvo una gran suma de
dinero. Enriquecido con esto, decidió viajar a Jerusalén junto con su segunda
esposa y con Eva, hija de la primera esposa. En este camino, al verse obligado
a permanecer en Venecia siete u ocho meses, se dedicaba al estudio de la Cábala
y el Talmud; aquí dio muchos sermones elegantes en la Sinagoga, de forma que
era juzgado digno por todos de ser enumerado entre los Rabinos, tal como lo
probó lo que aconteció, dado que, predicando en Jerusalén, de tal forma agradó
a los judíos que, habiéndole asignado el estipendio acostumbrado a los Rabinos,
lo condecoraron con el honor del Rabinato. Habiéndose vuelto eximio Cabalista
era conocido por los judíos, no sólo de Jerusalén, sino también en el resto de
la Palestina, Siria, África, Asia y Europa, a los cuales era enviado a menudo
para recoger las limosnas.
Mucho ha escrito sobre
él el R. P. Carlos Felipe Armenzano, Lector de Sagrada Teología de la Orden de
Predicadores, el cual transmitió otras noticias al eruditísimo Juan Pastritius,
Lector de Sagrada Teología Polémica en el Colegio Urbano de Propaganda Fide,
exaltando y señalando en gran manera su admirable conversión a Cristo. Referir
todas estas cosas es totalmente ajeno a nuestro instituto puesto que lo nuestro
no es describir las vidas de los Rabinos, sino componer una gran Biblioteca
Rabínica de los Rabinos y de sus escritos, sobre todo teniendo en cuenta que me
dijeron que está lista para mandar a la imprenta su vida en la Ciudad de Reggio
Emilia, escrita por el R. P. Francisco María, de la Orden de los Capuchinos. El
día 25 de junio de 1664, regenerado en la fuente del bautismo, tomó el nombre Próspero
Ruggeri, y gracias a sus argumentos y ejemplo tres o cuatro familias
recibieron la fe de Cristo; el día 6 de agosto del mismo año, día en que cae la
fiesta de San Cayetano, se convirtió su mujer, conversión que fue atribuida con
razón a la intercesión del Santo, dado que había decidido perseverar en la
superstición judaica; por lo cual concibió tal afecto y reverencia por San
Cayetano, que tomó el nombre Cayetana en el bautismo, y desde entonces
tuvo siempre sobre su lecho una imagen de San Cayetano para venerar, y al hijo
que le nació después del bautismo lo llamó Cayetano. Muchas cosas escribió
Próspero, tanto antes como después de su conversión, que he dejado de lado y
que narró el citado Juan Pastritius en su vida y que me fueron comunicadas.
1. Escribió un libro
llamado שונע שמחות, Souáng
Semachóth, Saturitas laetitiarum [Abundancia de alegrías], donde
expone las calamidades que están en las Lamentaciones, y escribió que el Mesías
iba a venir el año 5436, es decir, el 1676.
2. En el Comentario פּרקי שירח, Pirke
Scirá, en el cual se examinan los nombres de todas las creaturas que alaban
a Dios y de qué manera lo alaban; principalmente sobre los perros.
3. Vida de ר׳יושף קארו, R. José Karo,
sobre el cual fabulan los judíos diciendo que todos los días una voz del cielo
le enseñaba cosas maravillosas ante la presencia de los demás Rabinos, los
cuales, oyendo su voz, quedaban todos atónitos.
4. La historia de un
Rabino Cabalista llamado José della Rena, que quería hacer venir al
Mesías esperado por medio de sus juramentos, pero, engañado por su locura,
renegando de la ley de Moisés, se entregó a los demonios.
5. Sobre la profecía
de un cierto niño de Galilea que, en cuanto vio la luz, profetizó cinco cosas
en lengua caldea.
Escribió otras muchas
cosas que están inéditas y que pueden verse en el R. P. Carlos Felipe Armenzano.
Solo resta que hagamos referencia a la manera con que fue convencido por él R.
David Tintore, y por medio de qué razonamientos.
[1] Basnage relata, según Bartolocci a quien cita, la historia de esta conversión, Hist. des Juifs, Lib. III, cap. 12, § VI. Dice que el nombre Meir, que significa el Iluminador, fue dado a este rabino, «porque el día de su nacimiento, la casa de su padre se llenó de una luz brillante y celestial». Leemos en Bartolocci: «Et quia nativitatis die legebatur in synagogis historia nativitatis Mosis prophetæ, in qua a rabbinis refertur, quod tunc paterna domus (la casa de Amram, por supuesto) tota refulsit lumine, hinc Meir nomen, hoc est Iluminantis, junxit». Más adelante dice que el joyero David «quería comerse el corazón de Próspero». En su lugar, el original que seguía dice: «Quería dar a comer su corazón a los perros». La antropofagia está incluida en las prohibiciones de la ley mosaica. Estas observaciones son inútiles si se quiere, pero vale la pena señalar la ligereza de este renombrado escritor que no cesa de hostigar a la Iglesia Católica.
[2] Ver nuestro vol.
I, pp. 283 sigs.