miércoles, 24 de diciembre de 2025

Introducción a los Evangelios Sinópticos (IV de V)

 II. Evangelio según San Marcos

 

1. Nombre: A veces es llamado Marcos, otras, Juan (Hech. XIII, 13) y otras, Juan Marcos (Hech. XII, 12). Su madre se llamaba María, probablemente era viuda, y tenía una casa grande.

 2. Profesión: Era levita y siguió a Pedro desde la Ascensión hasta alrededor del año 45, cuando se fue con Pablo y Bernabé, para luego volver con Pedro el año 50; sin embargo, no fue ni apóstol ni formó parte de los 72 discípulos.

 3. Citado: Ya era conocido a fines del siglo I (San Clemente) y en el siglo II (Pastor Hermas, San Ignacio, San Justino, Taciano) y también lo citan los herejes a partir del siglo I.

El Evangelio de San Marcos es muy poco citado entre los Padres, y la razón es obvia: tiene muy pocos versículos propios que no se encuentren en alguno de los otros evangelios.

 4. San Marcos es un judío que vive en Palestina: escribe como los semitas, con oraciones breves, proposiciones coordinadas (unión de dos o más oraciones simples) o con paralelismo; tiene palabras arameas (boanerges, talita kumi, corbán, etc.), no pocas construcciones semitas.

Conoce bien la ley y costumbres judías (VII, 1-4), la doctrina de los fariseos y saduceos (XII, 18), las rígidas observancias del sábado, etc.

Conoce bien la geografía del lugar, ya que cita incluso ciudades pequeñas; Jerusalén está muy presente a su alma, la sala donde Caifás juzga “está muy elevada sobre el atrio” (XIV, 66); la turba debía subir para ir al pretorio, etc.

Tampoco ignora el latín, ya que transcribe palabras latinas (XV, 39.44-45; V, 9; VI, 27 etc.).

 5. Pone por escrito la predicación de San Pedro:

domingo, 21 de diciembre de 2025

Introducción a los Evangelios Sinópticos (III de V)

      7. Finalidad: Probar a los judíos que Jesucristo es el Mesías prometido y profetizado.

 8. Argumentos internos que corroboran que el Evangelio fue escrito por un judío y que tenía conocimientos en lo relativo al dinero.

El autor conoce muy bien las condiciones:

a) Geográficas: habla de lugares grandes, pequeños, muy pequeños (Decápolis, Tiro, Cesarea de Filipo, Corazaín, Betsaida, Nazareth, Getsemaní, Calvario, etc.) sin ninguna aclaración y apenas indica los lugares por donde pasó Jesús, porque los supone conocidos.

b) Políticas: nombra los diversos rectores de Israel sin hacer ninguna aclaración (Herodes, Arquelao, Herodes Antipas, Pilatos, Caifás, Filipo).

c) Religiosas: Cita el A.T. como autoridad suprema inapelable para probar el cumplimiento de las profecías en Jesucristo.

d) Pecuniarias: Es el único que habla sobre el tributo de didracma que había que pagar (XVII, 24) y especifica bien qué clase de tributo se le pagaba al César cuando lo llama “moneda del tributo” (XXII, 19), mientras que Marcos y Lucas le dan el nombre común “denario”.

Que Mateo fue su autor también se ve porque (sin dudas por humildad), cuando da el catálogo de los Apóstoles agrega el adjetivo “publicano” a su nombre y se coloca en el octavo lugar y no en el séptimo, como en las demás listas[1].

 

 

8. Plan general del primer Evangelio

viernes, 19 de diciembre de 2025

Introducción a los Evangelios Sinópticos (II de V)

 Evangelios Sinópticos

 I. Evangelio según San Mateo

 

1. Nombre: Mateo: “Don de Dios”, también llamado Leví (Mc. II, 14; Lc. V, 27).

 2. Profesión: Era publicano, o sea, recaudador de impuestos, profesión mal vista en aquel entonces y era casi sinónimo de “pecador”. Para este oficio se requería, al menos como condición general, una cierta familiaridad con el dinero, sus leyes, etc. Algo así como un contador en nuestros días. Veremos enseguida que esta característica marca a fuego su evangelio.

 3. Citado: Ya era conocido a fines del siglo I (Didajé, San Clemente, Epíst. de Bernabé, San Ignacio Mártir, San Policarpo) y también lo citan los herejes a partir del siglo II.

 4. Fecha de composición: Variedad de opiniones entre los autores católicos. La fecha más antigua es entre 3 y 10 años después de la muerte de Cristo; otros la ponen entre los años 40-50.

En lo personal, me inclino hacia el año 38.

 5. Idioma: Según la tradición, fue el único evangelio escrito en arameo, la lengua que hablaba el pueblo en Israel en ese entonces.

El Evangelio arameo se perdió hacia el siglo II, pero se conservó la traducción griega, que ya había sido aceptada en época de los Apóstoles (tema interesantísimo y muy relacionado con la famosa “cuestión sinóptica”).

 6. Destinatarios inmediatos: Los destinatarios inmediatos del Evangelio de San Mateo son los judíos creyentes de Palestina.

 Esta afirmación se corrobora por el análisis interno del libro:

 I. Judíos:

lunes, 15 de diciembre de 2025

Algunas notas a Apocalipsis XVIII, 23b-24

 23b. porque tus mercaderes eran los magnates de la tierra, porque con tu hechicería fueron engañadas todas las naciones.

 Concordancias:

 Ἔμποροι (mercaderes): cfr. Apoc. XVIII, 3.11.15. Ver Mt. XIII, 45.

 Μεγιστᾶνες (magnates): cfr. Mc. VI, 21; Apoc. VI, 15.

 γῆς (tierra): cfr. Apoc. I, 5.7; V, 3.6.10.13; VI, 13.15; X, 2.5-6.8; XI, 4; XIV, 7; XVII, 2.5.18; XVIII, 1.3.9; XIX, 2.19; XX, 8-9.11; XXI, 1.24. Ver Apoc. III, 10; VI, 4.8.10; VII, 1-3; VIII, 5.7.13; IX, 1.3-4; XI, 6.10.18; XII, 4.9.12-13.16; XIII, 3.8.11-14; XIV, 3.6.15-16.18-19; XVI, 1-2.18; XVII, 8; XVIII, 3.9.11.24.

 Φαρμακείᾳ (hechicería): cfr. Gál. V, 20; Apoc. IX, 21; XXI, 8; XXII, 15 (siempre hablando de Babilonia y sus habitantes).

 Ἐπλανήθησαν (fueron engañadas): cfr. Mt. XVIII, 12-14 (los pequeños, engañados, tal vez, por los Falsos Profetas del primer Sello); XXII, 29; Mc. XII, 24 (sobre la resurrección); Mt. XXIV, 4-5.11; Mc. XIII, 5-6; (Falsos Profetas del primer Sello); Mt. XXIV, 24; Mc. XIII, 22; II Jn. 7-8; Apoc. XIII, 14; XIX, 20 (Bestia de la Tierra – Falso Profeta); I Cor. VI, 9-10. (Sobre los herederos del Reino de los Cielos, cfr. Apoc. XXI, 8 y XXII, 15); Lc. XXI, 8 (falsos profetas antes de la destrucción de Jerusalén); II Tim. III 13 (hombres malos); Heb. III, 10 (generación perversa del desierto); Sant. I, 16; I Jn. II, 26 (tradición); Apoc. XII, 9; XX, 3.8.10 (Dragón); (Parecería haber una relación entre Babilonia y los dos grupos de falsos Profetas). Ver I Cor. XV, 33; Gál. VI, 7; Tito III, 3; Heb. XI, 38; Sant. V, 19; I Ped. II, 25; II Ped. II, 15; I Jn. I, 8; III, 7; Apoc. II, 20.

Jesús es acusado de engañador: cfr. Mt. XXVII, 63; Jn. VII, 12.47.

 Πάντα τὰ ἔθνη (todas las naciones): cfr. Apoc. XIV, 8; XVIII, 3; XX, 3.8. Ver Apoc. XV, 4; XXI, 24.26; XXII, 2.

  

Notas lingüísticas:

 Zerwick: “μεγιστᾶνες: hombre grande. En plural, próceres, príncipes”.

 

Citas Bíblicas:

domingo, 14 de diciembre de 2025

Algunas notas a Apocalipsis XVIII, 22-23a

 22. Y voz de citaristas y músicos y flautistas y trompetistas no se oirá en ti ya y ningún artífice de arte se hallará en ti ya y voz de molino no se oirá en ti ya 23a. y luz de lámpara no alumbrará en ti ya y voz de esposo y esposa no se oirá en ti ya,

 Concordancias:

 φωνὴ (voz): cfr. Apoc. I, 10.12.15; III, 20; IV, 1.5; V, 2.11-12; VI, 1.6-7.10; VII, 2.10; VIII, 5.13; IX, 13; X, 3-4.7-8; XI, 12.15.19; XII, 10; XIV, 2.7.9.13.15.18; XVI, 1.17-18; XVIII, 2.4.23; XIX, 1.5-6.17; XXI, 3.

 Κιθαρῳδῶν (citaristas), cfr. Apoc. XIV, 2.

 Μουσικῶν (músicos): Hápax absoluto.

 Αὐλητῶν (flautistas): Hápax en el Apoc. cfr. Mt. IX, 23.

 Σαλπιστῶν (trompetistas): Hápax absoluto.

 ἀκουσθῇ (oirá): cfr. Apoc. I, 3.10; II, 7.11.17.29; III, 3.6.13.20.22; IV, 1; V, 11.13; VI, 1.3.5-7; VII, 4; VIII, 13; IX, 13.16; X, 4.8; XII, 10; XIII, 9; XIV, 2.13; XVI, 1.5.7; XVIII, 4; XIX, 1.6; XXI, 3; XXII, 8.17-18. Ver Apoc. IX, 20; XI, 12; XVIII, 23.

 Τεχνίτης (artífice): Hápax en el Apoc. cfr. Hech. XIX, 24.38; Heb. XI, 10.

 Τέχνης (arte): Hápax en el Apoc. cfr. Hech. XVII, 29; XVIII, 3.

 Εὑρεθῇ (será hallada): cfr. Apoc. II, 2; III, 2; V, 4; IX, 6; XII, 8; XIV, 5; XVI, 20; XVIII, 14.21.24; XX, 11.15.

 Μύλου (molino): cfr. Mt. XVIII, 6 (escándalo – arrojar al mar); XXIV, 41; Mc. IX, 42 (escándalo – arrojar al mar); Apoc. XVIII, 21.

 Φῶς (luz): cfr. Apoc. XXI, 24; XXII, 5.

 Λύχνου (lámpara): cfr. Apoc. XXI, 23; XXII, 5.

 Φάνῃ (alumbrará): cfr. Apoc. I, 16; VIII, 12; XXI, 23.

 Νυμφίου (esposo): Hápax en el Apocalipsis.

 Νύμφης (esposa): cfr. Apoc. XXI, 2.9; XXII, 17.

 

 Notas lingüísticas:

 Zerwick: “πᾶςοὐ: hebraísmo = ningún”.

  

Citas Bíblicas:

sábado, 13 de diciembre de 2025

Algunas notas a Apocalipsis XVIII, 21

 21. Y alzó un ángel fuerte una piedra como un molino grande, y (la) arrojó al mar, diciendo: “Así con ímpetu será arrojada Babilonia, la gran ciudad y no será hallada ya.

 Concordancias:

 Ἦρεν (alzó): cfr. Apoc. X, 5.

 Ἀγγελος (ángel): cfr. Mt. XI, 10; Mc. I, 2; Lc. VII, 27 (San Juan Bautista); Lc. VII, 24; IX, 52 (mensajeros); Sant. II, 25 (dos mensajeros de Josué); Apoc. I, 1; V, 2; VII, 2; VIII, 3-5; X, 1.5.8-10; XIV, 6.8-9.15.18; XVIII, 1; XIX, 17; XXII, 16 (San Gabriel); VIII, 2.6.8.10.12-13; IX, 1.13-14; X, 7; XI, 15 (7 Arcángeles que tocan las siete trompetas); I, 20; II, 1.8.12.18; III, 1.7.14 (Jerarquía); III, 5; V, 11; VII, 1.2.11; XIV, 10 (ángeles); IX, 11 (ángel del abismo); IX, 14-15 (ángeles malos de la sexta Trompeta); XII, 7 (ángeles de San Miguel); XII, 7.9 (ángeles de Satanás); XIV, 17.19 (un ángel con la hoz afilada); XV, 1.6-8; XVI, 1; XVII, 1.7; XXI, 9; XXII, 8 (ángeles de las siete Copas); XVI, 5 (ángel de las aguas); XX, 1 (San Miguel); XXI, 12 (12 Apóstoles); XXII, 6 (¿Cristo?).

 ἰσχυρὸς (fuerte): cfr. Mt. III, 11; XII, 29; Mc. I, 7; III, 27; Lc. III, 16; XI, 21-22; Apoc. V, 2; VI, 15; X, 1; XVIII, 2.8.10; XIX, 6.18.

 Ἀγγελος ἰσχυρὸς (ángel fuerte): cfr. Apoc. V, 2; X, 1. Ver Apoc. XVIII, 2.

 λίθον (piedra): cfr. Mt. XXI, 44 y Lc. XX, 18 (Parusía); Lc. XVII, 2 (Babilonia); I Cor. III, 12; Apoc. IV, 3; XVIII, 12.16.21; XXI, 11.19.

 Μύλινον (molino): cfr. Mt. XVIII, 6 (escándalo – arrojar al mar); XXIV, 41; Mc. IX, 42 (escándalo – arrojar al mar); Apoc. XVIII, 22.

 Ἔβαλεν (arrojó): cfr. Mt. III, 10; V, 25.29; VI, 30; VII, 19; XIII, 42.48.50; XVIII, 8-9.30; XXI, 21; Mc. IX, 42.45.47; XI, 23; Lc. III, 9; XII, 49.58; Jn. XV, 6; Apoc. XIV, 16.19; XIX, 20; XX, 3.10.14-15. Ver Apoc. II, 10; VI, 13; VIII, 5.7-8; XII, 9-10.13.

 θάλασσαν (mar): cfr. Apoc. VII, 1-3; VIII, 8-9; X, 2.5.8; XII, 12.17; XIII, 1; XVI, 3; XX, 13 (?); XXI, 1 (?). Ver Apoc. IV, 6; V, 13; X, 6 XIV, 7; XV, 2; XVIII, 17.19; XX, 8.

 Ὁρμήματι (con ímpetu): Hápax absoluto.

 Βαβυλὼν μεγάλη (Babilonia la grande): cfr. Dan. IV, 27; Mt. VII, 24-27; Lc. VI, 46-49; Apoc. IX, 14; XVI, 12 (Éufrates); XVI, 19 (¿Babilonia?) XIV, 8; XVI, 21; XVII, 1.5.18; XVIII, 2.16.18-19.21; XIX, 2 (Babilonia). Ver Apoc. XVIII, 10: “Babilonia, la ciudad, la fuerte”.

  μεγάλη πόλις (la gran ciudad): cfr. Apoc. XI, 8; XVI, 19; VII, 18; XVIII, 10.16.18-19. Ver Apoc. XIV, 8; XVII, 5; XVIII, 2.

 Εὑρεθῇ (será hallada): cfr. Apoc. II, 2; III, 2; V, 4; IX, 6; XII, 8; XIV, 5; XVI, 20; XVIII, 14.22.24; XX, 11.15.

  

Notas Lingüísticas:

 Zerwick: “οὐ μὴ (no): cfr. v. 7”.

 Zerwick: “εὑρεθῇ (hallada): cfr. v. 14”.

  

Concordancias:

jueves, 11 de diciembre de 2025

Algunas notas a Apocalipsis XVIII, 20

 20. ¡Alégrate sobre ella, cielo y (¿esto es?) los santos y los apóstoles y los profetas, pues ha juzgado Dios vuestro juicio contra ella!

 Concordancias:

 Εὐφραίνου (alégrate): cfr. Lc. XII, 19; XVI, 19; Hech. VII, 41; Apoc. XI, 10 (los que habitan sobre la tierra); XII, 12 (cielos).

 οὐρανέ (cielo): cfr. Mt. V, 34; XXIII, 21-22; Hech. VII, 49; Apoc. III, 12; IV, 2; V, 3.13; VIII, 1; X, 1.4-6.8; XI, 12-13.15.19; XII, 1.3.7.8.10.12; XIII, 6; XIV, 2.13.17; XV, 1.5; XVI, 11.21; XVIII, 1.4-5; XIX, 1.14; XX, 1.9.11; XXI, 2.10.

 Οἱ ἅγιοι (los santos): cfr. Mt. XXVII, 52; Hech. IX, 13; XXVI, 10; I Cor. VI, 2; Ef. I, 18; II, 19; III, 18; IV, 12; Col. I, 12; I Tes. III, 13; II Tes. I, 10; Apoc. V, 8; VIII, 3-4; XI, 18; XIII, 7.10; XIV, 12; XVI, 6; XVII, 6; XVIII, 24; XIX, 8; XX, 9; XXII, 11.21. Ver Apoc. XX, 6.

 Οἱ ἀπόστολοι (los apóstoles): cf. II Cor. XI, 5.13; XII, 11-12; Apoc. II, 2; XXI, 4.

 Προφήτας (profetas): cfr. Mt. X, 41; XXIII, 34; Lc. XI, 49; XIII, 33-34; Apoc. X, 7; XI, 10.18; XVI, 6; XVIII, 24; XXII, 6.9.

 Οἱ ἀπόστολοι καὶ οἱ προφῆται (los apóstoles y los profetas): cfr. Lc. XI, 49.

 Οἱ ἅγιοι καὶ οἱ ἀπόστολοι καὶ οἱ προφῆται (santos y profetas): cfr. Apoc. XI, 18; XVI, 6; XVIII, 24.

 Κρίνας (ha juzgado): cfr. Jn. IX, 39; XII, 48; II Tes. II, 12; Apoc. VI, 10 (Mártires del quinto Sello); XVI, 5 (habitantes de la tierra); XVIII, 8; XIX, 2 (Babilonia por muerte a mártires del Anticristo).11 (Anticristo - Juicio de las Naciones). Ver Apoc. XI, 18; XX, 12-13.

 Siempre en sentido peyorativo.

 Κρίμα (juicio): cfr. Mt. VII, 2; XXIII, 14; Mc. XII, 40; Lc. XX, 47; XXIII, 40; XXIV, 20; Jn. IX, 39; Hech. XXIV, 25; Rom. II, 2-3; III, 8; XI, 33; Heb. VI, 2; I Ped. IV, 17; II Ped. II, 3; Jud. I, 4; Apoc. XVII, 1; XX, 4. Ver Jn. IX, 39; XII, 48; II Tes. II, 12; Apoc. XVI, 5 (habitantes de la tierra); XVII, 1; XVIII, 8; XIX, 2 (Babilonia por muerte a mártires del Anticristo).11 (Anticristo - Juicio de las Naciones). Ver Apoc. XI, 18; XX, 12-13.

  

Notas Lingüísticas: