miércoles, 3 de enero de 2018

Algunas Notas a Apocalipsis III, 15-17

15. Sé tus obras: no eres ni frío ni cálido. ¡Ojalá frío fueras o cálido!

Comentario:

Bartina: "Alonso ha estudiado detenidamente el sentido que se ha de dar a tibieza en este pasaje. Después de un pormenorizado análisis de la historia de la exégesis viene a concluir, aportando además razones intrínsecas, que se trata del pecado mortal, no del venial."[1]

Wikenhauser: "La Iglesia de Laodicea recibe el más severo reproche, sin ningún elogio. Cristo la califica de tibia, sumida en el espíritu mundano y en la indiferencia. Es cierto que no ha caído en culpas graves, ni todavía ha renegado de Cristo (aún no está fría), pero le falta aquel espíritu de alegre entrega, el entusiasmo de fiel adhesión que le darían calor".

Exceptuando la referencia a las culpas graves, coincidimos con el comentario de Wikenhauser.


16. Así, porque tibio eres y ni cálido ni frío, voy a vomitarte de mi boca.

Comentario:

Scío: “Lo que significa, según los Escolios griegos: te apartaré, que es decir, te privaré de mi amistad y familiaridad”.


17. Porque dices: “rico soy y me he enriquecido y de nada necesidad tengo”, y no sabes que tú eres el desdichado y miserable y pobre y ciego y desnudo.

Notas Lingüísticas:

Zerwick: σὺ: “tú” enfático (tú eres desdichado, etc.)”.

Zerwick: "Γυμνός: desnudo, insuficientemente vestido".

Mateos: "Πλούσιός εἰμι καὶ πεπλούτηκα: estado presente más definitividad: soy rico y rico para siempre”.


Comentario:


Estas riquezas parecen estar directamente relacionadas con la marca de la Bestia.

Straubinger: “Es lo contrario de la bienaventuranza de los pobres en espíritu (Mat. V, 3 y nota)”.

Straubinger nos llama la atención con respecto a la similitud entre este pasaje y lo que dice la gran Ramera en XVIII, 7: “… porque ella dice en su corazón: “Como reina estoy sentada y no soy viuda y jamás veré luto”.

Wikenhauser: "Su estado de depresión religiosa se debe en el fondo a dos circunstancias: falta de graves tribulaciones o persecuciones, que contribuyen siempre a sacudir los ánimos y también a que goza de un notable bienestar material".

Agregaríamos: la cizaña mezclada con el buen trigo y la levadura en control de toda la masa (Mt. XIII).

Alápide: “Da tres razones por las que es desdichado y miserable, primero porque era “pobre”, es decir carente de caridad; segundo, “ciego”, ya que era imprudente en el obrar; tercero, “desnudo” ya que carece de buenas obras, puesto que obraba contando demasiado en sus propias fuerzas y con hipocresía. Estos tres, a saber: pobreza, desnudez y ceguera, si están en el mismo sujeto, hacen de él un ser desdichado y miserable (…) por lo cual opone a estas tres dolencias otros tantos remedios: a la pobreza le opone el oro (…) a la desnudez el vestido (…) y a la ceguera la cura para la vista…”.

Para que esta interpretación sea factible miserable debe ir precedido de un artículo al igual que “desdichado”, tal como se encuentra en algunas versiones y no parece improbable, o por lo menos ir unido a "desdichado".




[1] J. Alonso: El sentido de tibieza en la recriminación de la Iglesia de Laodicea: MisC 19 (1953) 121-130; El estado de tibieza espiritual en relación con el mensaje del Señor a Laodicea (Comillas 1955) 94.