Sabido es que el
Apocalipsis está estructurado en base al número siete. Aquí solamente nos
proponemos mostrar un septenario dentro de otro septenario, a saber, indicar
cómo las mismas cartas están, a su vez, divididas en siete partes cada una.
No daremos aquí la exégesis
de las siete Iglesias sino tan solo mostraremos su división septenaria, absteniéndonos
de mayores comentarios al respecto.
I) Éfeso
1) Destinatario.
1. Al Ángel de la
Iglesia en Éfeso escribe.
2)
Título de Cristo.
1. El que tiene las
siete estrellas en su diestra, el que camina en medio de los siete candelabros,
los dorados
3) Alabanzas.
2.
Sé las obras de ti y el trabajo y la perseverancia de tí, y que no puedes
soportar a los malos y que has probado a los que se dicen apóstoles y no lo
son, y los has hallado mentirosos.
3. Y tienes perseverancia y padeciste por mi Nombre y no
has desfallecido.
6. Pero esto tienes:
que odias las obras de los Nicolaítas, que yo también odio.
4) Reprehensiones.
4. Pero tengo contra ti que tu amor, el primero, has
dejado.
5) Exhortaciones-Amenazas
5. Recuerda, pues, de
dónde has caído y arrepiéntete y haz las primeras obras; si no, vengo a ti, y
moveré tu candelabro de su lugar, a menos que te arrepientas.
6) Conclusión.
7. El que tiene oído
oiga lo que el Espíritu dice a las Iglesias
7) Promesa.
7. Al vencedor le daré
a comer del Leño de la vida que está en el Paraíso de Dios”.
II) Esmirna
1) Destinatario.
8. Al Ángel de la
Iglesia en Esmirna escribe.
2) Título de Cristo.
8. El primero y el último,
que fue muerto y vivió.
3) Alabanzas.
Sé la tribulación tuya
y la pobreza -pero eres rico-, y la blasfemia de los que se dicen ser judíos y
no son sino sinagoga de Satanás.
4) Reprehensiones.
No hay
5) Exhortaciones (Amenazas no hay).
10. No temas lo que
vas a padecer. He aquí que el diablo va a meter a algunos de vosotros en la
cárcel para que seáis probados y tendréis tribulación de diez días. Se fiel
hasta la muerte y te daré la corona de la vida.
6) Conclusión.
11. El que tiene oído
oiga lo que el Espíritu dice a las Iglesias
7) Promesa.
11. El vencedor no
será dañado por la muerte, la segunda.
III) Pérgamo
1) Destinatario.
12. Al ángel de la
Iglesia en Pérgamo escribe.
2) Título de Cristo.
12. El que tiene la
espada, la de dos filos, la aguda:
3) Alabanzas.
13. Sé dónde habitas:
donde está el trono de Satanás; y retienes mi nombre y no has negado mi fe, ni
aún en los días en que Antipas, el testigo mío, el fiel a mí, fue muerto entre
vosotros donde habita Satanás.
4) Reprehensiones.
14. Pero tengo contra
ti algunas cosas, porque tienes allí quienes sostienen la doctrina de Balaam,
el que enseñaba a Balac a poner escándalo ante los hijos de Israel, para que
comiesen de lo sacrificado a los ídolos y cometiesen fornicación.
15. Así tienes también
a quienes sostienen la doctrina de los Nicolaítas de igual manera.
5) Exhortaciones-Amenazas.
16. Arrepiéntete,
pues; si no, vengo a ti pronto y pelearé contra ellos con la espada de mi boca.
6) Conclusión.
17. El que tiene oído
oiga lo que el Espíritu dice a las Iglesias
7) Promesa.
17. Al vencedor le
daré del maná del escondido, y le daré una piedrita blanca, y en la piedrita un
nombre nuevo escrito que nadie sabe sino el que recibe.
IV) Tiatira
1) Destinatario.
18. Al Ángel de la
Iglesia en Tiatira escribe
2) Título de Cristo.
18. El Hijo de Dios,
el que tiene sus ojos como llamas de fuego y sus pies como bronce bruñido.
3) Alabanzas.
19. Sé las obras tuyas
y tu amor y tu fe y tu ministerio y tu perseverancia; y tus obras, las
postreras, superiores a las primeras.
4) Reprehensiones.
20. Pero tengo contra
ti que dejas hacer a la mujer Jezabel, la que se dice profetisa y enseña y
engaña a mis siervos para que cometan fornicación y coman de lo sacrificado a
los ídolos.
5) Exhortaciones-Amenazas.
21. Y le he dado a
ella tiempo para que se arrepienta, pero no quiere arrepentirse de su
fornicación.
22. He aquí que a ella
la arrojo en cama y a los que adulteren con ella, (los arrojo) en grande
tribulación, si no se arrepienten de las obras de ella.
23. Y mataré sus hijos
con peste, y conocerán todas las Iglesias que Yo soy el que escudriño riñones y
corazones y daré a cada uno de vosotros según vuestras obras.
24. A vosotros digo, a
los demás que estáis en Tiatira, cuantos no tenéis esta doctrina, que no habéis
conocido "las profundidades de Satanás", como dicen: no echo sobre
vosotros otra carga
25 sino la que tenéis:
manteneos firmes hasta que venga.
6) Promesa.
26. Y al vencedor,
esto es, al que guardare hasta el fin mis obras, le daré autoridad sobre las naciones,
27 y las destruirá con
vara de hierro, cual vasos de cerámica serán quebradas
28 como Yo también
recibí de mi Padre y le daré la estrella, la matutina.
7) Conclusión.
El que tiene oído oiga
lo que el Espíritu dice a las Iglesias
V) Sardes
1) Destinatario.
1 al Ángel de la Iglesia en Sardes escribe
2) Título de Cristo.
1. El que tiene los siete espíritus de Dios y las siete estrellas
3) Alabanzas.
No hay
4) Reprehensiones.
1. Sé tus obras, que nombre tienes que vives y estás
muerto.
5) Exhortaciones-Amenazas.
2. Hazte vigilante y
confirma los demás (nombres) que quedan, que estaban a punto de morir;
porque no he hallado tus obras completas delante de mi Dios.
3. Recuerda, pues,
cómo recibiste y oíste y guárdalo, y arrepiéntete. Si no velas vendré como
ladrón, y no sabrás a qué hora vendré sobre ti.
4. Pero tienes pocos
nombres en Sardes que no han manchado sus vestidos y andarán conmigo de blanco,
porque son dignos[1].
6) Conclusión.
6. El que tiene oído
oiga lo que el Espíritu dice a las Iglesias
7) Promesa.
5. El vencedor será
vestido así, con vestiduras blancas y no borraré su nombre del libro de la vida
y confesaré su nombre delante de mi Padre y delante de sus ángeles.
VI) Filadelfia
1) Destinatario.
7. Y al ángel de la Iglesia
en Filadelfia escribe
2)
Título de Cristo.
7. Estas cosas dice el
Santo, el Veraz, el que tiene la llave de David, el que abre y nadie cerrará, y
que cierra y nadie abre.
3) Alabanzas.
8. Sé tus obras: he aquí
que he puesto delante de ti una puerta abierta, que nadie puede cerrar, porque
tienes poco poder y has guardado mi palabra y no has negado mi Nombre.
9. He aquí que (te)
doy (algunos) de la Sinagoga de Satanás, que dicen ser judíos y no lo
son, sino que mienten; he aquí que haré que ellos vengan y se postren delante
de tus pies y conozcan que Yo te amé.
10. Porque has
guardado la palabra de la perseverancia mía, Yo también te guardaré de la hora
de la prueba, la que ha de venir sobre todo el mundo habitado, para probar a
los habitantes de la tierra.
4) Reprehensiones.
No hay.
5) Exhortaciones-Amenazas.
11. Vengo pronto;
mantén firme lo que tienes para que nadie tome tu corona.
6) Conclusión.
13. El que tiene oído
oiga lo que el Espíritu dice a las Iglesias
7) Promesa.
12. Al vencedor lo
haré columna en el templo de mi Dios y no saldrá más y escribiré sobre él el
nombre de mi Dios y el nombre de la ciudad de mi Dios, la nueva Jerusalén, la
que desciende del cielo viniendo de mi Dios y el nombre mío, el nuevo.
VII) Laodicea
1) Destinatario.
14. Al ángel de la
Iglesia en Laodicea escribe
2) Título de Cristo.
14. Estas cosas dice
el Amén, el testigo, el fiel y veraz, el principio de la creación de Dios.
3) Alabanzas.
No hay.
4) Reprehensiones.
15. Sé tus obras, que
no eres ni frío ni hirviente. ¡Ojalá fueras frío o hirviente!
5) Exhortaciones-Amenazas.
16. Así, porque eres
tibio, y ni hirviente ni frío, estoy por vomitarte de mi boca.
17. Pues dices: “Yo
soy rico, me he enriquecido, de nada tengo necesidad”, y no sabes que tú eres
el desdichado y miserable y pobre y ciego y desnudo.
18. Te aconsejo que
compres de Mí oro acrisolado por el fuego, para que te enriquezcas y vestidos
blancos, para que te vistas y no aparezca la vergüenza de tu desnudez y colirio
para ungir tus ojos, para que veas.
19. Yo reprendo y
castigo a los que amo. Ten, pues, ardor y conviértete.
20. He aquí que estoy
a la puerta y golpeo. Si alguno oyere mi voz y abriere la puerta, entraré a él
y cenaré con él y él conmigo.
6) Conclusión.
22. El que tiene oído
oiga lo que el Espíritu dice a las Iglesias
7) Promesa.
21. Al
vencedor le daré sentarse conmigo en mi trono, así como Yo vencí y me senté con
mi Padre en su trono.
[1] Esto
no parece ser una alabanza ya que siempre se alaba o reprenden las obras
y no las personas, razón por la cual esto debe mirarse como un consuelo o
exhortación. En Laodicea, donde tampoco hay alabanzas, sin embargo hay quienes
son "amados" por Jesús (III, 19).